Adrián Garelik, CEO y cofundador de Flixxo, quien es uno de los mentores en los grupos de trabajo del Hack MAFIZ, conversó acerca de lo que han venido logrando este grupo de jóvenes creadores digitales participantes del Hack, resaltando un arduo trabajo que empezó con más de 1.700 participantes de los que ahora solo quedan 20.

“Los mejores participantes ya han ganado y están aquí en Málaga haciendo un cortometraje en cinco equipos de cuatro personas; bueno, en realidad en cinco equipos de cinco personas, porque cada equipo tiene un participante extra que es la inteligencia artificial” dijo Garelik.

El Hack, que es la sección más novedosa del Festival de Málaga y que va por su segunda edición, ha logrado que el Festival (y el MAFIZ, el área de industria del festival) luzca más joven y con una impronta digital que lo diferencia de los demás mercados, según Ralph Haiek, a cargo de esta sección, quien cree que el evento ha crecido con respecto a la primera edición.

“Estamos muy contentos con los 20 participantes que están trabajando en cinco grupos de cuatro integrantes haciendo un desafío presencial sobre una historia de amor en Málaga con un componente de inteligencia artificial (IA)” explicó Haiek.

“El objetivo es que todos aprendamos a usar la inteligencia artificial como una herramienta más que nos ayude a crear contenido y perderle el miedo a que nos reemplace como creadores. Y el desafío en sí es crear una historia romántica en Málaga utilizando la inteligencia artificial de alguna forma” así explicó Florencia Haiek, coordinadora del Hack MAFIZ Málaga lo que es el último desafío de esa sección.

Nuevamente, en esta edición, el foco ha estado en los talentos y no en los proyectos. La idea es que se inscriban participantes “que no tengan experiencia, que no tengan proyectos previos y que acá empiecen a armar sus proyectos”.

La Villana es un equipo creativo que produce contenido digital y se especializa en las microseries, o las antiguas webseries que con las nuevas plataformas de redes sociales tienen nuevas posibilidades.

“Las microseries son la antigua webserie con más calidad, con todo lo que hemos aprendido de la web 3: historias en formato corto, potentes y reales, de nicho” apunta Gabriela Cortés. “Es un formato más económico y queremos explotarlo para hacer cortos para que quienes quieran meterse en la industria puedan hacer una microserie como una nueva forma de vender” agrega Andrea Meneses.

Con mucho humor, inteligencia emocional e inteligencia artificial los proyectos audiovisuales de los 20 ganadores del Hack Málaga del MAFIZ despuntaron en la segunda edición. Microseries, videojuegos y competencias fueron algunos de los formatos utilizados.

AI Love You Game, Cupido, El Gran Hack, No nos moverán y Hola, otra vez fueron los títulos que presentaron los ganadores de América Latina y España el jueves 16 en el marco del Mafiz en Málaga. La premisa era una realizar una historia de amor con herramientas de la inteligencia artificial.

Pablo Velasco, director de Talento y Contenido de Zas Talents, estuvo en el Hack MAFIZ Málaga para hablar sobre las plataformas que están creciendo y la manera de posicionar sus contenidos. En su opinión, esta sección habla de los tiempos que vienen. “Tener un espacio para creadores digitales en un festival tan importante como el de Málaga demuestra que el mundo del contenido ya cambió”.

Sobre los participantes dijo: “A los creadores los veo muy motivados. Los contenidos que hicieron y están haciendo están increíbles y nos demuestran que en plataformas digitales se puede llevar calidad” comentó.

Soy Cloe, existo se presentó este lunes en el Festival de Málaga en la sección Regional Film Hub de Spanish Screenings 2023. El documental de 78 minutos cuenta la vida de Cloe, un niña trans que ha tenido que vivir todo tipo de situaciones en su corta vida por el proceso de transición, y sigue luchando por un cambio en las leyes españolas para conseguir el cambio de sexo legal en su DNI, al mismo tiempo que exige derechos y aceptación.

Cloe compartió que el haber visto el resultado final de esta película documental ha sido como una manera de decir que todo su sufrimiento ha servido para algo.

Algo En Común es una organización colombiana que desde hace diez años trabaja para potenciar la creación de historias transformadoras, diversas e innovadoras en Iberoamérica. “Tenemos 180 proyectos fortalecidos, incluyendo 80 guionistas de nueve países, entre largometrajistas, cortometrajistas y realizadores de series de ficción. También 3.500 beneficiados en proyectos online” aseguró Diana Trujillo, directora de Contenidos de la Fundación, quien estuvo en el Festival de Málaga.

En el encuentro en España, Algo en Común asistió al estreno de Diógenes, largometraje del peruano Leonardo Barbuy, quien contó con el apoyo de la fundación.

Desiree Reyes, productora de Ebribari Audiovisual de República Dominicana, estuvo en el Festival de Málaga trabajando en varios proyectos de coproducción con España.
 
“Estamos en la fase de desarrollo con financiación cerrada. Por el momento no podemos dar más detalles. Esto es parte de una iniciativa que nos permite conseguir financiación para películas, que sin dejar de ser dominicanas, pueden ampliar la colaboración, los mercados y presupuestos con otras fuentes de financiación como las españolas” explica Reyes, que asiste al MAFIZ por tercera ocasión.

Sonaly Tuesta, directora peruana, presentó en el MAFIZ 2023 su ópera prima Misión Kipi, un documental que cuenta la historia de la creación de una robot constituida de chatarra informática a cargo del maestro rural Walter Velásquez, quien se ha dedicado por muchos años a la ciencia y tecnología.

Se trata de un proyecto transmedia que habla de la innovación en la sierra del Perú y su directora busca tener visibilidad con propósito de apoyar al maestro para que continúe con su proyecto de educar a los niños en Perú.

El boom de las series en España para televisión y plataformas ha hecho que la industria audiovisual de este país necesite una amplia gama de profesionales, tantos que en ocasiones hay sectores que no cuentan con los suficientes. Así lo confiesa Alejandro Rius, CEO de DØ Postproduction, una empresa enfocada en la realización de VFX.

“El desafío hoy en día es el personal. Somos entre 45 y 50 trabajadores estables, y tenemos nuestras máquinas y licencias, pero encontrar el personal cualificado es lo más complicado. Nos falta mano de obra cualificada, porque no hay la suficiente en España” contó el ejecutivo durante su presencia en Iberseries.

Francisco Salguero, joven productor guatemalteco, asistió al MAFIZ en busca de socios coproductores, distribuidores y que financien algunos de los proyectos de su país que está actualmente representando en territorio español.

“Tenemos a la tierra maya con bellos paisajes como lagos, una ciudad colonial rodeada de volcanes donde se produce uno de los mejores cafés del mundo. Guatemala es un país que ofrece una gran infraestructura para la producción de contenidos audiovisuales y el mundo no lo está aprovechando. Queremos presentar nuestras ideas y para ofrecer nuestros servicios” dijo Salguero.

Una de las inquietudes que manifiesta Rodrigo Figueroa Reyes, CEO de FiReSPORTS, es la distancia que hay entre las marcas con los creadores de contenido. Rodrigo, quien participó en el MAFIZ enmarcado en el Festival de Málaga, advierte que en algún momento esta realidad debe cambiar y propiciarse más encuentros con los anunciantes en los festivales.

“Hay que empezar a enseñarles a las marcas que pueden ser coproductoras de contenido y de forma orgánica” cuenta Rodrigo.

Perú como invitado de honor de la edición 26 del Festival de Málaga y protagonista del Latin American Focus de MAFIZ (Málaga Festival Industry Zone), muestra su experiencia cinematográfica y las ventajas de rodar en el país.

“Es una experiencia importante porque nos pone en la palestra de la industria cinematográfica a nivel mundial, entendiendo que el Festival de Málaga es uno de los eventos más importantes. Para nosotros es importante haber sido seleccionados como País de Honor” cuenta Erika Chávez Huamán, directora de la Dirección del Audiovisual, la Fonografía (DAFO) y los Nuevos Medios del Ministerio de Cultura de Perú.

Tondero Distribución presentó dos coproducciones: De Caperucita a Loba y El caso Monroy, esta última es una de las 14 películas latinoamericanas seleccionadas para la Sección Oficial del Festival de Málaga, de entre 2.322 inscritas.

Además, participaron con cuatro películas en la muestra de Perú como país de honor en el festival: Hatun Phaqcha, Tierra Sana, de Delia Ackerman; Un mundo para Julius, de Rossana Díaz Costa; y El caso Monroy,de Josué Méndez. “Se está coproduciendo mucho y siento que es un gran momento para la industria peruana” dice Cecilia Gómez de la Torre, directora asociada de Amazonas Films/Tondero Distribución.

El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) de Argentina tuvo una participación muy importante con nueve películas, algunas nacionales y otras coproducciones.

“Estamos muy contentos con la presencia argentina y porque hemos lanzado el catálogo audiovisual en formato digital que permite la visibilización de todo lo que se está haciendo en Argentina. Es un gran aporte para la producción, exhibición y distribución de nuestro cine en el mundo” comentó Cecilia Diez, gerenta de Asuntos Internacionales del Incaa y productora general del Festival de Cine de Mar del Plata y de Ventana Sur.

Glorimar Marrero Sánchez, escritora y directora de Puerto Rico, conversó sobre el lanzamiento de su película La pecera, que se llevó a cabo en el marco del Festival de Málaga. Marrero, quien fue la showrunner informó que es una coproducción entre España y Puerto Rico: Solita Films, Auna Producciones, La Canica Films.

”Esta peli cuenta la vida de Noelia, enferma de cáncer, no quiere tratarse y decide buscar vías de escape regresando a su Vieques natal, una isla puertorriqueña en cuyas aguas se esconden toneladas de residuos contaminantes provocados por el ejército norteamericano” comentó.

“Prácticamente el 50% de lo que se produce en cine, sobre todo en televisión, son adaptaciones literarias porque ya son historias preexistentes, o sea, es una buena materia prima con una buena trama, unos buenos personajes y con una audiencia predispuesta positivamente porque la gente que normalmente lee un libro ve después la película o la serie de TV” comentó Sydney Borjas, CEO de Scenic Rights.

Sin embargo, aclara que son dos lenguajes diferentes, aunque hay libros que son muy audiovisuales; en cambio, hay unos que te plantean una buena historia, pero no son para el audiovisual, y en ese caso llevan un trabajo de transformación.