El negocio del streaming se ha colocado en un lugar central en la estrategia de Televisa. Por ello, además de conservar sus contenidos, ha reactivado los presupuestos para comprar y producir programas originales que alimentarán las plataformas de la próxima unión Televisa-Univisión, y que saldrán a competir con los streamers internacionales.
“El presupuesto de producción original se reactivó y es muy jugoso. Ya hay varias películas y series en producción” apuntó Vanessa Rosas, COO de blim TV.
Hoy, el SVOD de blim TV —OTT que Televisa lanzó en 2016— tiene 37 mil horas de contenido original, 22 mil de las cuales son producciones de Televisa. El AVOD, en tanto, dispone de 14 mil horas de contenido, exclusivamente de Televisa y especialmente sus telenovelas y programas de nostalgia.
blim TV también compra, para su SVOD, contenidos en español producidos por majors o por productoras independientes. La compañía tiene unas 15 mil horas de contenido adquirido y este año comprará entre 10 mil y 12 mil horas más que el año pasado. La búsqueda está enfocada en contenidos icónicos de la región (como Amores perros o Relatos salvajes), infantiles, incluyendo animaciones, y otros programas relevantes.
“El contenido que más compramos es el infantil porque Televisa no lo produce” indicó Rosas. También aseguró que la reactivación del presupuesto para comprar derivó en un crecimiento del average watch time porque la gente comenzó a ver nuevos contenidos.
“Las plataformas internacionales pueden tener mucho contenido, pero no se acercan ni lejanamente a la cantidad de horas de contenido en español que produce Televisa”
“He comprado contenido argentino, colombiano, cubano, dominicano, chileno, hay muy buenos contenidos en América Latina y vale la pena tener una plataforma latinoamericana para mostrarlo al mundo. También los están comprando otras plataformas internacionales, porque no se puede pretender ser exitoso solo con contenido extranjero, y cada vez hay más oferta pero un solo bolsillo. Por eso tienes que pensar muy bien qué ofreces, cómo lo ofreces, cuál es tu diferenciador y cuántos servicios de OTT puede pagar el mercado. Quien ofrezca más contenidos y servicios a cada miembro de la familia, es el que va a quedar. Para el usuario prevalecerán variables como presupuesto, comodidad, usabilidad y flexibilidad en las formas de pago” agregó.
La industria, según Rosas, vive un “momento revolucionario”. Por un lado, las majors de Hollywood dejaron de vender sus contenidos y se fusionan para conformar conglomerados de producción que alimenten sus propias plataformas. Por el otro, los streamers tradicionales, como Netflix, ya no pueden comprar a las majors y, por lo tanto, tienen que invertir en producción.
“Se trata de entender en qué compites y en qué no compites. Televisa es el mayor productor de contenido en español del mundo y las grandes marcas pueden tener mucho contenido pero no se acercan ni lejanamente a la cantidad de horas de contenido en español que produce Televisa. Y nuestro nicho es el público de habla hispana que busca producciones en español con impronta latina, y cada vez hay mejores productores latinos. Latinoamérica lleva varios años haciendo productos de alta calidad, por eso las plataformas también están comprando contenidos latinos” finalizó Rosas.