Una de las realizaciones que promete dar de qué hablar en el cierre de 2024 es Aullido de invierno, película dirigida por Matías Rojas Valencia y producida por Clara Films, Centauro Comunicaciones, A Simple Vista y Maravillacine. El formato se estrenará el próximo mes de noviembre en Chile, Colombia y México.

Rojas Valencia dio detalles de este formato: “La película es un híbrido, comprende una parte documental, y dentro de este documental hay una pequeña historia de ficción. Las dos historias de alguna forma dialogan sobre el tema de fondo que tributa a la historia reciente de Chile con respecto a derechos humanos y memoria”.

El film hasta ahora ha hecho su recorrido por festivales de países como Estonia, Francia y Chile. “La parte documental cuenta la historia de Ingrid y Francisco, que son dos personas de tercera edad que viven en aislamiento en la Patagonia de Chile, luego de haber escapado de una secta poderosa y que duró por mucho tiempo en Chile llamada Colonia Dignidad” adelantó el cineasta.

El relato documental se entrelaza con la historia de ficción protagonizada por Paulina García, donde una mujer intenta pedir perdón por una culpa que ha cargado toda su vida y que también está relacionada a Colonia Dignidad.

UN LANZAMIENTO ESPECIAL 

La artista recordó que la iniciativa de hacer esta cinta surgió de una investigación de aproximadamente ocho años que hizo para otra película anterior suya, titulada Un lugar llamado Dignidad: “En este proceso conocí a Ingrid y a Francisco. Ellos me ayudaron en la investigación con sus testimonios reales y ahí nació la idea de hacer un documental sobre su historia y entrelazarla con esta parte de ficción con información que ellos también me contaron”.

Françoise Nieto, directora de Negocios y Desarrollo Creativo de Centauro, contó que accedieron a un fondo del Ministerio de Cultura de Chile para promocionar la película en Colombia. “Con este fondo también vamos a hacer un lanzamiento especial. Una premier muy elegante con concierto y exposición de fotografía” aseveró.

Por su parte, la productora Clara Larraín (de Clara Films) afirmó que “le hemos querido dar un tratamiento diferente en la distribución, generando subproductos de la película, como obras de videoarte con escenas que no quedaron en el corte final”.