La financiación colectiva de proyectos es, de acuerdo a Adrián Garelik, CEO y cofundador de Flixxo, el modelo que más puede funcionar en Latinoamérica.
Garelik, que participó en la charla“Nuevas herramientas financieras para proyectos audiovisuales” en Iberseries & Platino Industria, dijo que debido a que la industria se está reconfigurando por la crisis actual, han detectado distintos modelos de financiación: crowdfunding, tradicional, autofinanciación y financiación colectiva a través de criptomonedas y NFT, “que hacen que las producciones sean más dinámicas, sean apoyadas por su comunidad y que los creadores puedan contar la historia con total libertad”.
“En Argentina está funcionando muy bien la financiación colectiva, ya hay varios casos de películas que fueron financiadas así por Comunidad Orsai que ya tienen tres proyectos financiados a través de la comunidad: 2.000 personas invirtieron en la primera película que fue Uruguaya, 5.000 invirtieron en la serie Canelones y 10.700 personas invirtieron en la ultima película dirigida por Diego Peretti” comentó.
Indicó que la Comunidad Orsai hace muchos streaming para que los inversionistas vivencien lo que va pasando, que elijan el póster de la producción, participen en la escogencia de los actores, que vayan a la gran premier, “les permite hacer un seguimiento del proceso de producción de una película que para la gente es magia. Creo que este es un modelo que en Latinoamérica va a funcionar muy bien”.
Relató que en la primera serie que lanzaron, que fue La frecuencia Kirlian, una animación de terror para adultos que estuvo en Netflix, sacaron unos coleccionables digitales inspirados en la serie y los vendieron a la comunidad. “Además de ser únicos, coleccionables, les da titularidad sobre el 0,3% de las ganancias futuras. Estamos haciendo la primera experiencia con una película, que ya está en producción y esperamos replicarlo para el año que viene. Aspiramos a poder hacer cinco películas más con este modelo” dijo.
Destacó que para armar comunidades —que son la clave para la financiación colectiva de un proyecto— se necesita un propósito. “Esa comunidad tiene que estar unida en un propósito” y citó el caso de la cinta estadounidense Sound of freedom que fue financiada colectivamente y generó una gran taquilla.