La agencia liderada por Gustavo Lauría y Marco Vega fue reconocida con leones por tres campañas diferentes para Corona/AB InBev.
Second Opportunity League se llevó plata en Entertainment Lions for Sport; 900 Minutes For Equality (900 Minutos por la Igualdad) obtuvo bronce en Brand Experience & Activation; y Plastic Fishing Tournament (Campeonato de Pesca de Plástico) se llevó bronce en Creative Effectiveness.
Estas tres campañas coinciden en que apuntan a tener un impacto social positivo en la sociedad. Y esto se debe, según Gustavo Lauría, CCO y fundador de la agencia, a que las empresas son el reflejo de las personas que están dentro. “Muchas veces me preguntan para qué marcas sueñas trabajar, y mi respuesta honesta siempre es: trabajo para la persona que está detrás de la marca, no para una marca en sí. Me encantaría que llegue un brief de Apple o, como a todos, hacer el comercial global de Nike, pero al fin y al cabo creo que el secreto de nuestro éxito es trabajar con la persona detrás de cada una de las marcas, porque así es como pasan las cosas de verdad”.
Sobre las campañas
900 Minutes For Equality
En México, el salario base de una jugadora de fútbol es diez veces inferior al de un hombre. Por eso, Corona junto a We Believers crearon el partido 900 minutos por la igualdad, en el que las mujeres jugaban diez veces más para ganar lo mismo que los hombres. De esta forma, Corona anima a otras marcas a invertir también en el fútbol femenino.
Second Chance League
Seis cárceles, diez equipos, 160 reclusos y una pasión inconmensurable. La iniciativa contó con la participación de las ONG Reinserta y Comunial. Los reclutadores de los equipos más importantes de México eligieron a los mejores jugadores para que se unan a sus plantillas una vez que salgan de prisión. Incluso ya cuentan con un exrecluso jugando para el Club América de México.
Plastic Fishing Tournament
Corona puso en marcha su primer Torneo de Pesca de Plástico en México, pagando a pescadores locales para que se adentraran en los mares no para pescar, sino para recuperar residuos de plástico. La idea, creada por la agencia We Believers, se hizo global y se extendió a países como China, Brasil e Israel.