Diptongo Media Group, es una empresa con 15 años en el sector y que actualmente se desempeña como productora, posproductora, agencia de publicidad y casa de distribución. 

Eduardo Arango (gerente general de Diptongo Media Group) recordó que recientemente la organización ha participado en realizaciones como La sinfonía de los bichos raros, una miniserie de fantasía musical para niños en live action y el documental 1994: el primer año del resto de nuestras vidas, que relata algunos de los acontecimientos más importantes que sucedieron en Colombia durante ese año.

En materia de posproducción y efectos especiales ha colaborado en proyectos como Los Billis, una serie coming-of-age estrenada en Prime Video, la cual está recreada en los años 80. La historia de dicho contenido se inspira en una pandilla de jóvenes de clase acomodada que existió en la ciudad de Bogotá. 

Para el ejecutivo Colombia “le sabe a cacao y a tierra, ¿por qué le pongo esas palabras?, porque siento que de alguna manera es un sabor de lucha, de perseverancia y de resiliencia”. Asimismo recalcó que, en su visión, “la industria colombiana ha ido en un crecimiento exponencial, pero ha sido en una batalla constante con una industria muy fuerte por fuera”.

En ese sentido, enfatizó que “en este momento estamos compitiendo con recursos colombianos contra Hollywood y eso nos complica. El mercado colombiano está muy golpeado y los presupuestos que se manejan aquí no dan para tener los artistas y la calidad que necesita la industria, entonces nos toca trabajar más para afuera para poder mantener nuestros mejores talentos”.

De todos modos reconoció que “lo que se ha logrado en Colombia en los últimos años de la mano de productoras audiovisuales muy grandes, que se han ido fortaleciendo, ha sido increíble. De la mano de ellos se han ido abriendo puertas a toda la industria y se han ido generando nuevos assets y nuevos temas puntuales que han ido fortaleciéndonos a todos”.

Sobre el sabor que escogió, explicó: “Me voy con cacao porque hicimos un documental sobre el cacao hace poco y la industria del café tiene cierta similitud con la audiovisual. De alguna manera, en ambas buscamos competir a nivel internacional, con nuestros activos, con nuestras cosas buenas, con nuestras cosas malas y dejar a un lado las historias que nos han caracterizado todos estos años, porque cada vez estamos demostrando que tenemos más assets, más activos, más locaciones, más infraestructura, mejor calidad de equipos y de personas”.