Uno de los planos más impresionantes en el audiovisual colombiano en 2024 apareció en el primer capítulo de la serie Secuestro del vuelo 601, de Miracol para Netflix, cuando salió el Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá con la fachada que tuvo hasta principios de la primera década del siglo XXI. Para los habitantes de la capital de Colombia que conocieron el antiguo El Dorado fue como retroceder en el tiempo al ver esta escena que le dio un realismo gigantesco a la serie, basada en hechos reales que transcurre en mayo de 1973.

“Lo primero que hicimos fue un gran estudio de fotos del Aeropuerto El Dorado en la época. Queríamos sí o sí tener la fachada que recordábamos del aeropuerto. Solicitamos permisos del aeropuerto para poder recrear esto” afirmó Óscar Botía, Director creativo y productor ejecutivo de Miracol Media.

Este trabajo que está a la altura de las grandes producciones del mundo, lo hizo un equipo de artistas VFX, que a partir de un plano real en una zona de estacionamiento de un centro comercial en Bogotá, construyó la fachada en 3D, dándole una textura realista.

“Con el tiempo que hemos estado trabajando en Colombia, sentíamos que teníamos el talento para hacer eso y que se viera bien” dijo Pablo González uno de los directores de la serie y destacó otras herramientas tecnológicas que usaron en la serie: utilizamos pantallas LED gigantescas que se pusieron alrededor de las ventanas del avión que proyectaban lo que los pasajeros estarían viendo. Fue un ejercicio de técnica ayudando a la dramatización”.

Camilo Prince, el otro director de Secuestro del vuelo 601, añadió que todo el equipo de producción desde sus diversas áreas trabajaron para que la recreación de los años 70 fuera muy fiel a la realidad. No había ningún departamento que no estuviera involucrado en cómo reconstruir esta época y atmósfera, de cómo estar en los 70, cómo se veía, se sentía y se escuchaba”.

Édison Monroy